En vísperas de la primera vuelta de las elecciones presidenciales -para las que su delfín, Iván Duque, es el favorito de las urnas-, el ex presidente colombiano Álvaro Uribe se ve envuelto en una nueva controversia: documentos diplomáticos estadounidenses de los años 90, de hecho, muestran que Washington sospechaba que estaba en contacto con el cartel de Medellín, la poderosa organización de narcotráfico liderada por Pablo Escobar. La revelación provino del New York Times, que publicó nueve cablogramas enviados por la embajada a Bogotá entre 1988 y 1995, en los que se informaba de declaraciones de otros líderes políticos de que Uribe había hecho contacto con la madre de Escobar, porque el narcotraficante quería que sirviera de enlace con el entonces presidente César Gaviria, a cambio de la financiación “negra” que el había garantizado para sus campañas electorales. Uribe reaccionó inmediatamente ante estas revelaciones, argumentando que “es totalmente falso que recibiera financiación electoral ilegal y denunciando que la publicación de informes diplomáticos estadounidenses no es más que “un truco sucio” para intentar influir en el resultado de la elección presidencial. En las políticas del pasado mes de marzo, de hecho, el ex presidente fue reelegido al Senado con el récord histórico de votos y su partido fue el más votado en las dos Cámaras. Ahora las encuestas pronostican que Duque no podrá ganar la primera vuelta de las elecciones presidenciales, pero cuenta con una ventaja de 10 puntos sobre Gustavo Petro (ex guerrillero del M-19, entonces alcalde de la capital y ahora exponente de la “Colombia humana”) en vista de la previsible votación del 17 de Junio. Uribe, después de ser un duro opositor al narcotráfico, fue también el enemigo más amargo del acuerdo firmado por el gobierno de Juan Manuel Santos, otro de sus delfines, que se convirtió en adversario y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y promotor del “no” que se impuso, aunque por un estrecho margen, en el referéndum sobre el acuerdo de paz, en octubre de 2016. Según los medios de comunicación colombianos, estas revelaciones de ultima hora que no son, además, una acusación contra Uribe, no tendrán una influencia decisiva en la votación de hoy, cuando  millones de colombianos están siendo llamados a las urnas para elegir un nuevo Jefe de Estado. La situación de crisis que siguió al desarme de las Farc, la llegada de una ola de emigrantes venezolanos huyendo del caos en su país, los escándalos de corrupción subsecuentes y la crisis económica “pesarán mucho más que las suposiciones de los diplomáticos estadounidenses sobre lo que hace más de 25 años era un joven político ambicioso”, dijo el politólogo Álvaro De Angelis. Colombia: socio de la OTAN Mientras tanto, en vísperas de la votación, se anunció que Colombia se convertirá en el primer “socio global” de la OTAN en América Latina. El presidente saliente, Juan Manuel Santos, lo ha dicho. “Formalizaremos en Bruselas la próxima semana y es muy importante, el ingreso de Colombia a la OTAN como socio global. Seremos el único país de América Latina con este privilegio”, dijo en un anuncio televisivo. “Después de siete años de trabajo sensato y dedicado, hoy hemos sido aceptados por derecho propio como miembros de la OSCE, la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico. “Ser parte de la OSCE y de la OTAN mejora la imagen de Colombia y nos convierte en un actor más importante en la escena internacional.

Acabo de hablar por teléfono con mi suegra y se me ocurrió de preguntarle sobre las elecciones políticas de hoy. Ella estaba totalmente desinformada y ignorante al respeto, contestándome que hoy se pudiera votar solamente un candidato porqué el otro quería instaurar, en Colombia, el sistema socialista del vecino Maduro. No comment…..